Monday, December 22, 2014

Francisco a la Curia: las 15 tentaciones que es necesario combatir

El papa Francisco se reunión este lunes por la mañana en el Vaticano, con los dirigentes y miembros de los diversos dicasterios, consejos, oficinas, tribunales y comisiones que la componen la Curia Romana y la invitó "a ser un cuerpo que intenta día tras día ser más vivo, más sano y armonioso y más unido entre sí y con Cristo''. Y para ello el Santo Padre, con franqueza paternal señaló las tentaciones que es necesario combatir.

''La Curia está siempre llamada a mejorar y crecer en comunión, santidad y sabiduría para realizar plenamente su misión. Y sin embargo, como cada cuerpo, también está expuesta a las enfermedades... Me gustaría mencionar algunas de las más frecuentes en nuestras vidas de curia.

Son enfermedades y tentaciones que debilitan nuestro servicio al Señor'', prosiguió el Pontífice y después de invitar  a todos a un examen de conciencia en este tiempo de Adviento, y en preparación de la Navidad, enumeró las 'enfermedades' curiales:

1 -  'La enfermedad de sentirse inmortal, inmune o incluso indispensable, dejando de lado los controles necesarios y normales. Una Curia que no es autocrítica, que no se actualiza, que no intenta mejorarse es un cuerpo enfermo... Es la enfermedad del rico insensato que pensaba vivir eternamente y también de aquellos que se convierten en amos y se sienten superiores a todos y no al servicio de todos''.

2- La enfermedad de "martalismo" (Marta), de la excesiva operosidad: es decir, de aquellos que están inmersos en el trabajo, dejando de lado, inevitablemente,''la mejor parte": Sentarse a los pies de Jesús. Por eso, Jesús invitó a sus discípulos a "descansar'' porque descuidar el necesario reposo conduce al estrés y la agitación. El tiempo del reposo para aquellos que han completado su misión, es necesario, es debido y debe tomarse en serio: pasar un "tiempo de calidad ''con la familia y respetar las vacaciones como un tiempo para recargarse espiritual y físicamente; hay que aprender lo que enseña el Eclesiastés que 'hay un tiempo para todo'.

3- La enfermedad del endurecimiento mental y espiritual: "Es la de los que, a lo largo del camino, pierden la serenidad interior, la vivacidad y la audacia y se esconden bajo los papeles convirtiéndose en 'máquinas de trabajo' y no en "hombres de Dios"... "Es peligroso perder la sensibilidad humana necesaria para hacernos llorar con los que lloran y se regocijan con los que gozan. Es la enfermedad de los que pierden 'los sentimientos de Jesús".

4 - Planificar como contador. "La enfermedad de la planificación excesiva y el funcionalismo: Es cuando el apóstol planifica todo minuciosamente y cree que haciendo así, las cosas efectivamente progresan, convirtiéndose en un contador o contable...Se cae en esta enfermedad porque siempre es más fácil y cómodo quedarse en la propia posición estática e inmutable. De hecho, la Iglesia se muestra fiel al Espíritu Santo en la medida en que no pretende regularlo ni domesticarlo ... Él es la frescura, la fantasía, la innovación".

5 - La no cooperación. "La enfermedad de la mala coordinación: Sucede cuando los miembros pierden la comunión entre sí y el cuerpo pierde la funcionalidad armoniosa y la templanza convirtiéndose en una orquesta que hace ruido porque sus miembros no cooperan y no viven el espíritu de comunión y equipo".

6 - "La enfermedad de Alzheimer espiritual: Es decir, la de olvidar la 'historia de la salvación' la historia personal con el Señor, el 'primer amor'. Es una disminución progresiva de las facultades espirituales... Lo vemos en los que han perdido el recuerdo de su encuentro con el Señor...en los que construyen muros alrededor de sí mismos y se convierten cada vez más. en esclavos de las costumbres y de los ídolos que han esculpido con sus propias manos".

7 - "La enfermedad de la rivalidad y la vanagloria: Pasa cuando la apariencia, los colores de las ropas y las insignias de honor se convierten en el principal objetivo de la vida... Es la enfermedad que nos lleva a ser hombres y mujeres falsos y a vivir una mística falsa y un falso quietismo.

8 - "La enfermedad de la esquizofrenia existencial: Es la enfermedad de los que viven una doble vida, fruto de la hipocresía típica de los mediocres y del progresivo vacío espiritual que ni grados ni títulos académicos pueden llenar. Se crean así su propio mundo paralelo, donde dejan a un lado todo lo que enseñan con severidad a los demás y empiezan a vivir una vida oculta y, a menudo, disoluta''.

9 - ''La enfermedad de las habladurías, de la murmuración, del cotilleo: Es una enfermedad grave que comienza con facilidad, tal vez sólo para charlar, pero que se apodera de la persona convirtiéndola en sembradora de cizaña (como Satanás), y en muchos casos en asesino a sangre fría' de la fama de sus colegas y hermanos. Es la enfermedad de las personas cobardes que por no tener valor de hablar a la cara, hablan a las espaldas.

10 - "La enfermedad de divinizar a los jefes: Es la enfermedad de los que cortejan a los superiores, con la esperanza de conseguir su benevolencia. Son víctimas del arribismo y del oportunismo, honran a las personas y no a Dios. Son personas que viven el servicio pensando sólo en lo que tienen que conseguir y no en lo que tienen que dar. Personas mezquinas, infelices e inspiradas sólo por su egoísmo fatal".

11 - "La enfermedad de la indiferencia hacia los demás: Es cuando todo el mundo piensa sólo en sí mismo y pierde la sinceridad y la calidez de las relaciones humanas. Cuando los más expertos no ponen sus conocimientos al servicio de los colegas con menos experiencia. Cuando, por celos.. se siente alegría al ver que otros caen en lugar de levantarlos y animarlos".

12 - La enfermedad de la cara de funeral: Es decir, la de las personas rudas y sombrías, que consideren que para ser serios hace falta pintarse la cara de melancolía, de severidad y tratar a los demás --especialmente a aquellos considerados inferiores-- con rigidez, dureza y arrogancia. En realidad, la severidad teatral y el pesimismo estéril son a menudo los síntomas del miedo y la inseguridad en sí mismo".

13 - "La enfermedad de la acumulación: Cuando el apóstol busca llenar un vacío existencial en su corazón acumulando bienes materiales, no por necesidad, sino simplemente para sentirse seguro... La acumulación solamente pesa y ralentiza el camino inexorablemente".

14 - "La enfermedad de los círculos cerrados: Donde la pertenencia al grupo se vuelve más fuerte que la del Cuerpo y, en algunas situaciones que la de a Cristo mismo. También esta enfermedad comienza siempre con buenas intenciones, pero con el paso del tiempo esclaviza a los miembros convirtiéndose en "un cáncer" que amenaza la armonía del cuerpo y puede causar tanto daño -escándalos- especialmente a nuestros hermanos más pequeños".

15 - "La enfermedad de la ganancia mundana, del lucimiento: Cuando el apóstol transforma su servicio en poder, y su poder en mercancía para conseguir beneficios mundanos o más poderes. Es la enfermedad de la gente que busca insaciablemente multiplicar su poder y para ello son capaces de calumniar, difamar y desacreditar a los demás, incluso en periódicos y revistas. Naturalmente para lucirse y demostrarse más capaces que los otros".

''Por lo tanto -señaló Francisco, después de explicar el catálogo de las enfermedades- estamos llamados - en este tiempo de Navidad y todo el tiempo de nuestro servicio y de nuestra existencia - a vivir "según la verdad en el amor, intentando crecer en todo hacia aquel que es la cabeza, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien concertado, mediante la colaboración de todas las coyunturas, según la energía propia de cada miembro, recibe fuerza para crecer de manera de edificarse a sí mismo en la caridad''.

''Una vez leí -concluyó- que "los sacerdotes son como los aviones, son noticia sólo cuando se caen, pero hay tantos que vuelan. Muchos los critican y pocos rezan por ellos''. Es una frase muy simpática, pero también muy cierta, ya que describe la importancia y la delicadeza de nuestro servicio sacerdotal y cuanto daño puede causar un sacerdote que "cae" a todo el cuerpo de la Iglesia''.

Fuente: zenit.org

Saturday, December 13, 2014

Año de la Vida Consagrada: entrevista a Mons. José Rodríguez Carballo, "Más que las cifras, importa la calidad de la vida religiosa"

El arzobispo español José Rodríguez Carballo, Secretario de la Congregación vaticana para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, coordina el Año de la Vida Consagrada, en el que el Papa -afirma- pide a los religiosos «que seamos testigos de la alegría, que despertemos al mundo con la fuerza de la profecía, que salgamos a las periferias existenciales del hombre y de la mujer de hoy -allí donde sea necesaria la luz del Evangelio-, y que constantemente nos preguntemos qué es lo que el hombre y la mujer de hoy nos están pidiendo»

¿Por qué cree usted que el Papa ha dedicado el año 2015 a la Vida Consagrada?

El motivo que ha llevado al Santo Padre a dedicar el año 2015 a la Vida Consagrada es por la gran importancia que ésta tiene en la Iglesia y en el mundo. Por otra parte, era algo que pedían muchos consagrados y también la Congregación vaticana que se ocupa de la animación de esta forma de seguimiento de Cristo. El Papa Francisco, consagrado también él, como afirma en la Carta apostólica Testigos de la alegría, atento a las exigencias del momento y hombre de escucha, fue muy sensible a esta petición.

La celebración tiene lugar en el 50 aniversario de la publicación del Decreto Perfectae caritatis, del Concilio Vaticano II, sobre la adecuada renovación de la vida religiosa. Han sido años de grandes cambios en el mundo, el Concilio ¿logró sus objetivos en la renovación de la vida religiosa?

Ante todo, el Concilio, como ha dicho el Papa Juan Pablo II, ha sido una gran gracia para la Iglesia del siglo XX, por otra parte, sigue siendo brújula para la Iglesia del siglo XXI. Los consagrados vemos este tiempo del Concilio y del postconcilio como un tiempo del Espíritu, un tiempo de gracia, como afirma el Papa Francisco, por ello queremos mirar a estos años con inmensa gratitud. Por otra parte, hemos de reconocer que todavía no se ha realizado todo lo que pedía el Concilio, ni en la vida consagrada ni en la vida misma de la Iglesia, por eso queremos hacer memoria del Concilio -ése es el primer objetivo del Año de la Vida Consagrada-, lo que nos obliga a seguir actuándolo, a la luz del magisterio posterior de Pablo VI, de Juan Pablo II, particularmente a la luz de la Exhortación apostólica Vita consecrata, de Benedicto XVI y del Papa Francisco. Por todo ello, pensamos que la renovación querida y pedida por el Vaticano II debe continuar en fidelidad creativa a Cristo, al propio carisma y a los hombres y mujeres del mundo de hoy, teniendo en cuenta las exigencias de la propia vocación y misión.

Al analizar la situación de la vida religiosa actual, un asunto importante es la crisis de vocaciones. Dos cuestiones: ¿la falta de vocaciones pone en peligro la vida consagrada? Y, ¿no cree que hablamos con frecuencia de las consecuencias, pero no suficientemente de las causas de esta falta de vocaciones?

Ciertamente, la crisis de vocaciones es evidente, sobre todo en Europa. También en América del Norte, y ahora comienza a sentirse en América Latina. De todos modos, el problema más grave que veo yo es la falta de perseverancia. Todavía son muchos los que llaman a nuestras puertas, pero la perseverancia, sobre todo en algunas culturas, es bastante baja. El fenómeno de la disminución de vocaciones es muy complejo y las causas son muchas. No la última: la crisis que está atravesando la familia y la crisis de valores evangélicos que estamos viviendo. Yo creo que éste es un fenómeno que hay que analizar en profundidad. Por otra parte, teniendo en cuenta los candidatos que nos llegan, propios de la sociedad que todos hemos creado, hace falta un gran discernimiento y un acompañamiento muy personalizado. En este contexto, pienso que la formación ha de ser evangélicamente mucho más exigente (no rígida, sino evangélicamente exigente) y el discernimiento mucho más atento. No podemos caer en la tentación del número y de la eficiencia. Lo que cuenta no es tanto el número, sino la calidad evangélica de vida a la que todos los consagrados están llamados.

El Papa Francisco es jesuita, religioso. ¿Cuál cree usted que es su sueño para este año dedicado a la vida consagrada? ¿Cómo imagina Francisco la contribución de los religiosos a la Iglesia?

El sueño del Papa Francisco para este Año de la Vida Consagrada lo ha expresado muy bien en la Carta apostólica Testigos de la alegría, que dirigió a todos los consagrados con fecha del 21 de noviembre. ¿Qué pide a los consagrados para este año? Que seamos testigos de la alegría, que despertemos al mundo con la fuerza de la profecía, que seamos hombres y mujeres «expertos en comunión», que salgamos a las periferias existenciales del hombre y de la mujer de hoy, allí donde sea necesaria la luz del Evangelio, y que constantemente nos preguntemos qué es lo que el hombre y la mujer de hoy nos están pidiendo. He ahí algunos de los sueños del Papa Francisco para este Año, sueños que son desafíos para todos los consagrados, llamados a dejarse interrogar por este Papa que nos conoce, nos ama y quiere una vida consagrada que despierte al mundo. Respondiendo a estos sueños del Papa Francisco, el Año de la Vida Consagrada será, como él mismo afirma en Testigos de la alegría, «un verdadero kairós y un tiempo de Dios rico de gracias y de transformaciones». El Papa Francisco espera mucho de los consagrados. Para él, algo que no puede faltar en la vida de un consagrado es la profecía y la alegría. Nos lo recuerda constantemente. Sólo desde ahí podremos gritar al mundo la belleza del seguimiento de Cristo en la vida consagrada.

¿Qué les dice usted a las congregaciones religiosas que hoy día están preocupadas por su misma supervivencia, a causa de la falta de vocaciones?

La preocupación por la supervivencia no es buena. Es lógico que hay que preocuparse por las vocaciones. Es nuestro presente y nuestro futuro. Hay, pues, que orar por las vocaciones, testimoniar la belleza de seguir a Cristo en la vida consagrada -Venid y veréis es la única propaganda vocacional evangélica-; hay que intensificar la pastoral juvenil, pero todo ello no debe llevarnos a olvidar que lo importante es que, muchos o pocos, seamos significativos evangélicamente hablando, que la vida consagrada siga despertando al mundo, como lo despertaron nuestros fundadores y fundadoras. Por otra parte, nuestra vocación es ser levadura, fermento. La calidad evangélica de vida no está asegurada por los números. Es cuestión de tener, de asimilar los sentimientos de Cristo (véase Filipenses 2, 5), de tener un corazón nuevo, de colocar a Cristo en el centro de la vida y de intentar vivir el Evangelio en toda su radicalidad. Todo se juega en la pasión por Cristo y la pasión por la Humanidad, sobre todo la Humanidad herida. El resto lo dejamos en las manos del Señor.

¿Por qué decidió usted consagrar su vida a Dios? ¿Qué le diría usted a un joven que está pensando en hacerlo?

Me consagré al Señor en la vida religiosa desde muy joven, convencido de que era la vocación a la que el Señor me llamaba. Si volviera a nacer, haría lo mismo y a la misma edad, aunque hoy parezca difícil poder consagrarse tan joven como era yo entonces. Considero la vocación religiosa, y en mi caso franciscana, a la que he sido llamado sin mérito alguno por mi parte, un gran don, un gran regalo. Con el salmista digo: «¡Me ha tocado un lote hermoso, me encanta mi heredad!» Por ello, bendigo al Señor constantemente. Naturalmente, he encontrado en mi camino muchos que me han ayudado a decir Sí al Señor, comenzando por mis padres, mi formadores, muchos de mis compañeros y amigos. A todos ellos les debo mucha gratitud.

¿Qué decir a quién esté pensando en una posible consagración en la vida consagrada? 

A un joven que esté pensando dar una respuesta positiva a la llamada del Señor en la vida consagrada, le digo: «No tengas miedo. El Señor está contigo». ¿Te sientes débil? Como Pablo, podrás también tú hacer experiencia de que, cuando te sientes débil, entonces eres fuerte (véase 2 Corintios 12, 10). El Señor te dice, como a Jeremías: «No tengas miedo… Yo estoy contigo» (1, 8). Si el Señor te llama, te dará la gracia para poder responder con generosidad. Sé generoso y el Señor lo será muchísimo más contigo. No tengas miedo. El Señor no defrauda. ¡Adelante!, el Señor camina a tu lado.

Jesús Colina. Roma

Friday, December 12, 2014

“La fantasía del Espíritu ha creado formas de vida y obras tan diferentes, que no podemos fácilmente catalogarlas o encajarlas en esquemas prefabricados”, 2015, Año de la Vida Consagrada: Carta del Santo Padre Francisco a los consagrados.


Profecía de la Vida Consagrada

Espero que «despertéis al mundo», porque la nota que caracteriza la vida consagrada es la profecía (...)

El profeta recibe de Dios la capacidad de observar la historia en la que vive y de interpretar los acontecimientos: es como un centinela que vigila por la noche y sabe cuándo llega el alba (cf. Is 21,11-12). Conoce a Dios y conoce a los hombres y mujeres, sus hermanos y hermanas. Es capaz de discernir, y también de denunciar el mal del pecado y las injusticias, porque es libre, no debe rendir cuentas a más amos que a Dios, no tiene otros intereses sino los de Dios. El profeta está generalmente de parte de los pobres y los indefensos, porque sabe que Dios mismo está de su parte.

Fuente: 2015, Año de la Vida Consagrada:
Carta del Santo Padre Francisco a los consagrados

Vocaciones

La vida consagrada no crece cuando organizamos bellas campañas vocacionales, sino cuando los jóvenes que nos conocen se sienten atraídos por nosotros, cuando nos ven hombres y mujeres felices. Tampoco su eficacia apostólica depende de la eficiencia y el poderío de sus medios. Es vuestra vida la que debe hablar, una vida en la que se trasparenta la alegría y la belleza de vivir el Evangelio y de seguir a Cristo.

Fuente: 2015, Año de la Vida Consagrada:
Carta del Santo Padre Francisco a los consagrados

Alegría

«Donde hay religiosos hay alegría». Estamos llamados a experimentar y demostrar que Dios es capaz de colmar nuestros corazones y hacernos felices, sin necesidad de buscar nuestra felicidad en otro lado; que la auténtica fraternidad vivida en nuestras comunidades alimenta nuestra alegría; que nuestra entrega total al servicio de la Iglesia, las familias, los jóvenes, los ancianos, los pobres, nos realiza como personas y da plenitud a nuestra vida.

Fuente: 2015, Año de la Vida Consagrada:
Carta del Santo Padre Francisco a los consagrados

Expertos en comunión

Vivir el presente con pasión es hacerse «expertos en comunión», «testigos y artífices de aquel “proyecto de comunión” que constituye la cima de la historia del hombre según Dios».

En una sociedad del enfrentamiento, de difícil convivencia entre las diferentes culturas, de la prepotencia con los más débiles, de las desigualdades, estamos llamados a ofrecer un modelo concre-to de comunidad que, a través del reconocimiento de la dignidad de cada persona y del compartir el don que cada uno lleva consigo, permite vivir en relaciones fraternas.

Sed, pues, mujeres y hombres de comunión, haceos presentes con decisión allí donde hay diferencias y tensiones, y sed un signo creíble de la presencia del Espíritu, que infunde en los corazones la pasión de que todos sean uno (cf. Jn 17,21). Vivid la mística del encuentro: «la capacidad de escuchar, de escuchar a las demás personas. La capacidad de buscar juntos el camino, el método», dejándoos iluminar por la relación de amor que recorre las tres Personas Divinas (cf. 1 Jn 4,8) como modelo de toda relación interpersonal (...)

Se trata de buscar la acogida y la atención recíproca, de practicar la comunión de bienes materiales y espirituales, la corrección fraterna, el respeto para con los más débiles... Es «la mística de vivir juntos» que hace de nuestra vida «una santa peregrinación»

Fuente: 2015, Año de la Vida Consagrada:
Carta del Santo Padre Francisco a los consagrados

“La fantasía de la caridad no ha conocido límites y ha sido capaz de abrir innumerables sendas para llevar el aliento del Evangelio a las culturas y a los más diversos ámbitos de la sociedad.” 2015, Año de la Vida Consagrada: Carta del Santo Padre Francisco a los consagrados.


Las Constituciones y Reglas de los consagrados: expresión del Evangelio

Para los fundadores y fundadoras, la regla ha sido el Evangelio, cualquier otra norma quería ser únicamente una expresión del Evangelio y un instrumento para vivirlo en plenitud. Su ideal era Cristo, unirse a él totalmente, hasta poder decir con Pablo: «Para mí la vida es Cristo» (Flp 1,21); los votos tenían sentido sólo para realizar este amor apasionado.

Fuente: 2015, Año de la Vida Consagrada:
Carta del Santo Padre Francisco a los consagrados

Comprensión de la historia y el carisma del propio Instituto según la Carta del papa Francisco a los consagrados

Vosotros no solamente tenéis una historia gloriosa para recordar y contar, sino una gran historia que construir. Poned los ojos en el futuro, hacia el que el Espíritu os impulsa para seguir haciendo con vosotros grandes cosas.

(...)

Cada Instituto viene de una rica historia carismática. En sus orígenes se hace presente la acción de Dios que, en su Espíritu, llama a algunas personas a seguir de cerca a Cristo, para traducir el Evangelio en una particular forma de vida, a leer con los ojos de la fe los signos de los tiempos, a responder creativamente a las necesidades de la Iglesia. La experiencia de los comienzos ha ido después creciendo y desarrollándose, incorporando otros miembros en nuevos contextos geográficos y culturales, dando vida a nuevos modos de actuar el carisma, a nuevas iniciativas y formas de caridad apostólica. Es como la semilla que se convierte en un árbol que expande sus ramas. Es oportuno que cada familia carismática recuerde este Año sus inicios y su desarrollo histórico, para dar gracias a Dios, que ha dado a la Iglesia tantos dones, que la embellecen y la preparan para toda obra buena (cf. Lumen gentium, 12).

Poner atención en la propia historia es indispensable para mantener viva la identidad y fortalecer la unidad de la familia y el sentido de pertenencia de sus miembros.

(...)

También es una manera de tomar conciencia de cómo se ha vivido el carisma a través de los tiempos, la creatividad que ha desplegado, las dificultades que ha debido afrontar y cómo fueron superadas.

Fuente: 2015, Año de la Vida Consagrada:
Carta del Santo Padre Francisco a los consagrados

Thursday, December 11, 2014

¿Qué es esto de tener vocación?, por José Gea

Vocación significa llamada, invitación y cosas por el estilo. Supongamos que a Mozart lo hubiesen dedicado al deporte; podía haber sido una nulidad; o que a Messi lo hubiesen dedicado a la música; lo mismo. Cada uno nacemos con unas cualidades y según ellas tenemos unas tendencias determinadas que marcan nuestra vocación. Esto vale para la vida natural.

Pero también nos da unas gracias o cualidades sobrenaturales y con unas y otras, de alguna manera, nos indica el camino que debemos tomar en la vida. Por decirlo de algún modo, Dios no nos echa al mundo y “defiéndete” como puedas. No; nos crea con una misión concreta y personal a cada uno y, para cumplirla nos ha dado unas cualidades concretas. Poniendo un ejemplo, podríamos decir que quiere como construir su Iglesia como un mosaico grandioso en que cada uno de nosotros venimos a ser como una piedrecita dentro del mismo en el que tenemos asignado un lugar concreto.
         
Pero como Dios no abandona al hombre al crearlo, llega el momento en que, de un modo u otro, nos llama y nos invita a ocupar el puesto que nos ha asignado al crearnos. Es el momento de la llamada o de la vocación.

Y así decimos que unos somos llamados a dedicarnos a una profesión o a formar una familia o a dedicarnos en exclusiva al Señor en el sacerdocio o en la vida consagrada. Es lógico que sea Dios quien nos llame pues es Él quien nos ha creado para un puesto determinado en la Historia y en la Iglesia.

Por tanto, no podemos decir que hoy haya pocas vocaciones sacerdotales o consagradas; sigue habiéndolas como siempre, muchas, tantas cuantas hacen falta. Pero una cosa es tener una vocación (la tenemos todos) y otra es responder positivamente a la llamada del Señor. Y cuando decimos que en la actualidad hay pocas vocaciones, no es que digamos que Dios llama pocas veces, sino que no hay muchas respuestas positivas a la llamada del Señor al sacerdocio o a la consagración. Y es que muchos jóvenes cuando se sienten llamados para dedicarse al Señor en exclusiva, miran hacia otra parte.

Algo de esto es lo que, a mi modo de ver, está sucediendo hoy. Dios sigue llamando y el hombre sigue sin querer escuchar su llamada. Y para justificarse en su conciencia, se pregunta ¿y cómo sé yo que me llama? Pues claro que lo puedes saber. ¿Cómo puedes saberlo? ¿Lo digo? Sí, lo voy a decir. Hay como cuatro puntos que pueden indicarte el camino para encontrar tu vocación.

Primero: Tener cualidades, o sea, vivir como cristiano en serio; no ser cristiano de nombre porque has sido bautizado; y si ves que ni siquiera vas a misa, empezar a ir; no tener un genio tan vivo que nadie puede soportarte; no querer ser el señor perfecto o la señora perfecta; no aguantar ni un ratito leyendo y, menos, estudiando; no ser un melindroso; ser incapaz de convivir. Y si ves algún defecto de éstos o de otro tipo, estar dispuesto a corregirlos.

Segundo: Tener recta intención, es decir, no querer ser sacerdote o consagrado para tener fama, para vivir bien, para brillar, para ser como mi tío o como mi primo o como mi tía o mi amiga…

Tercero: Tener cierta inclinación. Es  lógico. Así como en el orden humano hay quien tiene aptitudes para las letras o las ciencias, si uno tiene cierta inclinación a las matemáticas y hay quien no las quiere ver ni pintadas, y así como uno tiene una inclinación y cualidades para el deporte y no para hacer poesías, también uno puede tener una inclinación para ser sacerdote o para consagrarse al Señor siendo misionero o contemplativo aunque le guste también el matrimonio. Y en casos en que no lo vea claro, que no espere a que Dios le mande un angelito que se lo diga, sino que lo consulte con un sacerdote serio y experimentado, y que lo dialogue con el Señor.

Cuarto: Disponibilidad. Si no estás disponible, no darás el paso por más vueltas que le des. Todo en la vida cristiana es cruz; no creas que el matrimonio es un estado de placer; también es una cruz, no el embeleso del noviazgo. Dispuestos como el profeta: "Y percibí la voz del Señor que decía:  ¿A quién enviaré? ¿y quién irá en mi nombre? Dije: « Heme aquí: envíame. »" (Is. 6, 8). Y disponible como María: « He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra. » " (Lc. 1, 38).
         
Lo que nunca hay que hacer es aquello que se cuenta de una joven que ante la imagen de la Virgen con el niño en brazos, le decía y repetía: Madre, lo que quieras, monja o casada. El sacristán, cansado por tener que esperar todos los días para cerrar la iglesia, oyó lo que le estaba pidiendo a la Virgen; se escondió detrás de la imagen y simulando la voz de niño, le contestó: monja. Inmediatamente respondió ella: Cállate niño, que estoy hablando con tu madre.

Fuente: religionenlibertad.com

Monday, December 8, 2014

Calendario del Año de la Vida Consagrada (29.11.2014-2.2.2016)

CALENDARIO Y PROPUESTAS DE LA CIVCSVA-ROMA

1.  APERTURA:
. Vigilia de oración: 29 de noviembre de 2014
. I Domingo de Adviento: 30 de noviembre de 2014

2. CLAUSURA:
.  Vigilia de oración: 1 de febrero de 2016
.  Jornada mundial de la VC: 2 de febrero de 2016

3. TIEMPOS DE REFLEXIÓN Y DE COMPARTIR A NIVEL MUNDIAL
.  Encuentro Ecuménico de consagrados/as, Roma, 22-24 de enero de 2015
.  Seminario para formadores/as a la Vida Consagrada, Roma, 8-11 de abril de 2015
.  Laboratorio para jóvenes consagrados/as, Roma, 23-26 de septiembre de 2015.

4. SEMANA MUNDIAL DE LA VIDA CONSAGRADA EN LA UNIDAD 
Roma, 24 de enero –2 de febrero de 2016.

5. PARA INSTITUTOS DE VIDA CONSAGRADA 
Y SOCIEDADES DE VIDA APÓSTOLICA EN LA IGLESIA:
«El seguimiento evangélico, forma permanente de vida en la Iglesia, hacia el futuro».
Simposio internacional. Roma, 27-30 de enero de 2016.

6. EVENTOS PARA CELEBRAR JUNTOS en Roma:
. Vigilia de oración en S. Pedro: «Profecía, Santidad y Martirio en la ciudad humana»: 30 de enero de 2016.
. Audiencia del Santo Padre: 1 de febrero de 2016.
. Eucaristía de clausura del Año de la VC: 2 de febrero de 2016.

II. Los siete itinerarios

1. Laboratorios de estudio y condivisión organizados por Universidades Pontificias dirigidas por Órdenes religiosas sobre temas de Vida Consagrada.
2. Memoria sanctorum de la Vida Consagrada. Stationes en lugares de particular significatividad apostólica en el mundo.
3. Memoria martyrium consagrados y consagradas del siglo XX y XXI. Stationes en lugares de particular testimonio en el mundo.
4. Cadena mundial de oración entre monasterios. Stationes en monasterios de particular significatividad monástica en el mundo.
5. Sección monástica on-line del STUDIUM para las monjas contemplativas.
6. Caminos de significatividad evangélica decididos y realizados en interacción entre Institutos apostólicos, Sociedades de vida apostólica, Vida monástica, Institutos seculares, Ordo virginum, Nuevos institutos.
7. Via pulchritudinis. “Una cosa pido al Señor, sólo eso busco: habitar en la casa del Señor todos los días de mi vida para gustar la dulzura del Señor y contemplar la belleza de su templo” (Sal 27,4). Los lenguajes artísticos en la Vida Consagrada para la contemplación y el anuncio de la verdad y de la belleza de la fe.

III. Orientaciones desde CONFER (España) u otras Conferencias de religiosos propias del país

1. Desde los objetivos y propuestas de la CIVCSVA, procurar que sea un año para profundizar en el sentido de esta forma de vida y una ocasión para dar a conocer la vida consagrada en la Iglesia y en la sociedad.
2. Trabajar la organización del Año con CONFER regionales y diocesanas, concediendo importancia a la visibilización y movilización en cada rincón donde nos encontramos.
3. Promover actos de reflexión, pero también festivos, de simbología de comunión y proyectos de compromiso intercongregacionales.
4. Visibilización en los medios de comunicación, en las redes sociales y a través de las publicaciones propias de CONFER.
5. Que el Año ayude a mejorar en las mutuas relaciones entre nosotros/as, con pastores, laicos y demás bautizados en las distintas Iglesias particulares, para buscar una armonía de las relaciones en el camino del Pueblo de Dios.
6. Coordinar iniciativas con los institutos de vida consagrada, centros superiores de religiosos y publicaciones de vida religiosa.
7. Realizar las convocatorias habituales con este trasfondo del Año durante el tiempo que va a durar.
8. Tener en cuenta el Año Teresiano (V Centenario).
9. Propuesta directa para CONFER regionales y/o diocesanas:
Exposición sobre la Vida Consagrada en la diócesis.

IV. Orientaciones desde la  URC (Catalunya)

. Acentuar la centralidad de Cristo en n
. Generar una dinámica de salda que consolide parecencia de la Iglesia en la sociedad
. Rezar por las vocaciones
. Coordinar  las programaciones y celebraciones con los obispos de las diócesis

V. Orientaciones a nivel Congregacional 

. Acentuar la centralidad de Jesús, junto a María y José en Nazaret, en nuestra vida consagrada, comunitaria y apostólica
. Salir al encuentro de la realidad de las familias, los alumnos, jóvenes… manteniendo líneas de comunicación
. Rezar por las vocaciones  a la vida consagrada en nuestra Congregación con el testimonio de nuestra vida alegre y entregada
. Semana Vocacional: charlas, testimonios, exposiciones…
.  Jornada de puertas abiertas de las comunidades
. Pascua Familiar-Joven
. Encuentro de los voluntarios de las diferentes escuelas
. Dar a conocer la celebración de este año  en los ambientes de nuestra misión y apostolado
. Unirnos a las celebraciones organizadas  por la conferencia de religiosos del propio país
. Organizar algún encuentro con religiosos que desarrollen su labor en nuestro ámbito territorial
. Jornadas de Formación permanente
. Releer en comunidad el “Perfectae Caritatis”
. Grabar y escribir testimonios de nuestra vida y ponerlos en Naza-red
. Organizar un encuentro de los Confirmados en las escuelas a lo largo de 2015
. Participar en la JMJ 2015 en Cracovia (Polonia)
. Itinerarios del P. Fundador: lugares significativos del P. Fundador, mártires… recorrido

IV. Guión para el trabajo por grupos

1. ¿Qué expectativas personales tengo ante este año?
2. ¿Qué caminos hemos de evitar y cuáles hemos de recorrer para llegar al año dedicado a la Vida Consagrada?
3. ¿Qué imagen transmite hoy la Vida Consagrada en nuestra sociedad y en la Iglesia particular, en cada uno de nuestros lugares de vida y misión?
4. ¿Qué hemos de mejorar en la comunicación sobre la Vida Consagrada a la Iglesia y a la sociedad?
5. ¿Qué estrategias podemos desarrollar para lograr los objetivos del año dedicado a la Vida Consagrada: memoria agradecida, abrazar el futuro con esperanza y vivir el presente con pasión?

Wednesday, December 3, 2014

El Papa Francisco a la Vida Religiosa: "No debemos tener miedo de dejar los 'odres viejos"

La Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica ha celebrado su asamblea plenaria reflexionando sobre la actualidad de la vida consagrada en la Iglesia, cincuenta años después de los documentos conciliares Lumen gentium y Perfectae caritatis. El tema elegido era ''Vino nuevo en odres nuevos'' y el Papa Francisco, recibiendo esta mañana a ochenta de sus participantes, ha basado su discurso en los múltiples significados de esa frase.

"En la parcela de la viña del Señor representada por los que han elegido imitar a Cristo más de cerca mediante la profesión de los consejos evangélicos, ha madurado la uva nueva uva y se ha exprimido el vino nuevo -observó el Pontífice-. En estos días os habéis propuesto discernir la calidad y el sabor del vino nuevo cosechado en la larga temporada de la renovación, y al mismo tiempo evaluar si los odres que lo contienen, representados por las formas institucionales presentes hoy en día en la vida consagrada, son adecuados para contener este vino nuevo y favorecer su plena madurez. Como os he recordado otras veces no debemos tener miedo de dejar los odres viejos: es decir, de renovar los hábitos y las estructuras que, en la vida de la Iglesia y, por tanto, también en la vida consagrada ya no responden a lo que Dios nos pide hoy para que su Reino avance en el mundo: las estructuras que nos dan falsa protección y condicionan el dinamismo de la caridad y los hábitos que nos alejan del rebaño al que hemos sido enviados y nos impiden escuchar el grito de los que esperan la Buena Nueva de Jesucristo''.

''No os escondéis -prosiguió- los puntos débiles que puede tener la vida consagrada en nuestros días como la resistencia de algunos sectores al cambio, la menor fuerza de atracción, el importante número de abandonos, la fragilidad de algunas rutas de formación, el afán por las tareas institucionales y ministeriales a expensas de la vida espiritual, la difícil integración de la diversidad cultural y generacional, el problemático equilibrio en el ejercicio de la autoridad y en el uso de bienes.. Me preocupa también la pobreza... San Ignacio decía que la pobreza es la madre y también el muro de la vida consagrada. Y es madre también porque da vida y como muro protege de la mundanidad. Seguís queriendo escuchar las señales del Espíritu que abre nuevos horizontes y empuja a nuevos caminos, siempre partiendo de la regla suprema del Evangelio e inspirados por la audacia creativa de vuestros fundadores y fundadoras''.

El Papa enumeró después los criterios de orientación a seguir en la ''ardua tarea de evaluar el vino nuevo y comprobar la calidad de los odres'', citando entre ellos, la originalidad evangélica de las opciones, la fidelidad carismática, la primacía del servicio, la atención a los más pequeños y frágiles y el respeto por la dignidad de cada persona.

Antes de finalizar, animó a los presentes a seguir trabajando con generosidad e ingenio en la viña del Señor, ''para cosechar el vino bueno que revitaliza la vida de la Iglesia y alegra los corazones de tantos hermanos y hermanas necesitados de vuestra atención'' y subrayó que ''tampoco la sustitución de los odres viejos por los nuevos no es automática sino que requiere el compromiso y la capacidad para proporcionar el espacio idóneo para acoger y hacer fructificar los dones con que el Espíritu sigue embelleciendo a la Iglesia su esposa''.

''No os olvidéis -concluyó- de proseguir el camino de renovación iniciado y, en gran medida, realizado en los últimos cincuenta años, examinado toda novedad a la luz de la Palabra de Dios y escuchando las necesidades de la Iglesia y del mundo contemporáneo y utilizando todos los medios que la Iglesia pone a vuestra disposición para avanzar en el camino de vuestra santidad personal y comunitaria. Y entre estos medios el más importante es la oración...Decid a los nuevos miembros, por favor, que rezar no es perder tiempo, que adorar a Dios y alabarlo no es perder tiempo. Si nosotros, los consagrados, no nos detenemos cada día ante Dios en la gratuidad de la oración, el vino se volverá vinagre''.

Friday, November 7, 2014

El Papa llama a la unidad en la diversidad ante los superiores mayores italianos: "Algunas veces terminaréis a puños; esto no es un problema: es mejor esto que el terrorismo de los chismes"

El Papa Francisco ha vuelto ha vuelto a rechazar los chimes en una audiencia privada en la Sala Clementina del Palacio Apostólico con los participantes de la 54º Asamblea Nacional de la Conferencia Italia de Superiores Mayores.

"Por favor que no exista entre vosotros el terrorismo de los chismes, ¿eh? Expulsadlo. Que haya fraternidad. Y tú si tienes algo en contra de tu hermano, lo dices a la cara... Algunas veces terminaréis a puños; esto no es un problema: es mejor esto que el terrorismo de los chismes", ha exhortado.

De esta manera, ha criticado la costumbre de hablar mal de los demás a las espaldas y ha llamado a la fraternidad. "La comunidad no se elige previamente, uno se encuentra con personas de diferente carácter, edad, educación, sensibilidad y aún así tratan de vivir como hermanos. No siempre es posible, por supuesto, muchas veces, se equivocan, porque todos somos pecadores, pero reconocemos el error, se pide perdón y se ofrece perdón. Y esto es bueno para la Iglesia: hace circular la savia Iglesia de la fraternidad y también es bueno para toda la sociedad", ha comentado.

El Papa ha explicado que "la cultura dominante es individualista, centrada en los derecho subjetivos" algo que, según ha puesto de manifiesto, "corroe la sociedad desde su célula primaria que es la familia". Así, ha dicho que "la vida consagrada puede ayudar a la Iglesia y la sociedad en su conjunto, dando testimonio de la fraternidad. que se puede vivir juntos como hermanos en la diversidad". El Pontífice ha reconocido que no es "fácil" y que esto requiere sobre todo "oración y adoración".

El Papa ha comentado que "el carisma no se conserva como una botella de agua destilada sino que debe dar frutos con valentía y confrontarse con la realidad". En esta línea, ha puntualizado que la verdadera profecía "jamás es ideológica o sigue la moda" sino que es en realidad "un signo de contradicción, según el Evangelio, omo lo fue Jesús". "Jesús fue un signo de contradicción para las autoridades religiosas de su tiempo", ha comentado.

Así lo cuenta el VIS:

Los participantes en la asamblea nacional de la Conferencia Italiana de los Superiores Mayores (CISM) -alrededor de cien personas- fueron recibidos esta mañana en audiencia por el Papa en la Sala Clementina. El Pontífice quiso compartir con ellos algunos puntos de referencia para su camino, empezando por la ayuda que la vida religiosa brinda a la Iglesia haciéndola crecer mediante la atracción.

''Ante el testimonio de un hermano o una hermana que vive plenamente esa vida -dijo - la gente se pregunta: "¿Qué pasa aquí?" ,"¿Qué lleva a esta persona más allá del horizonte mundano?". Esto es lo primero: ayudar a la Iglesia a crecer a través de la atracción. Sin preocuparse de hacer prosélitos: atracción''.

El segundo punto fue la radicalidad que, aunque deba caracterizar en formas diversas a todos los cristianos, para los religiosos asume la forma de testimonio de profecía.

''El testimonio de una vida evangélica -explicó Francisco- es lo que distingue al discípulo misionero y, especialmente, a los que siguen al Señor en el camino de la vida religiosa. Y el testimonio profético coincide con la santidad. La verdadera profecía nunca es ideológica, no está en contraste con la institución: es institución. La profecía es institucional, no sigue la moda: es siempre un signo de contradicción según el Evangelio, como lo fue Jesús. Jesús, era un signo de contradicción para las autoridades religiosas de su tiempo.: los jefes de los fariseos y de los saduceos, los maestros de la ley. Y lo fue también para otras opciones y propuestas: esenios, zelotes..''

Para explicar el tercer punto el Papa citó las palabras del Padre presidente de los Superiores Mayores:

"No queremos combatir batallas de retaguardia, de defensa, sino estar en medio de la gente", con la certeza de la fe en que Dios siempre hace que su Reino germine y crezca. ''Esto no es fácil, no es obvio -observó- requiere la conversión; requiere, sobre todo, la oración y la adoración; y requiere compartir con el pueblo santo de Dios que vive en las periferias de la historia. Descentrarse. Todo carisma para vivir y ser fructífero esté llamado a descentrarse, para que en el centro esté sólo Jesucristo. No hay que guardar el carisma como una botella de agua destilada, hay que hacerlo fructificar con coraje, confrontándolo con la realidad actual, con las culturas, con la historia, como nos enseñan los grandes misioneros de nuestros institutos''.

La fraternidad es otro de los signos que la vida religiosa debe mostrar en una época, afirmó el Papa, en que la cultura dominante es individualista, centrada en los derechos subjetivos.

''La vida consagrada puede ayudar a la Iglesia y a toda la sociedad dando testimonio de fraternidad, de que se puede vivir juntos como hermanos en la diversidad porque en la comunidad no se elige antes; uno se encuentra con personas diversas por carácter, edad, educación, sensibilidad ... y sin embargo, se intenta vivir como hermanos. No siempre es posible, por supuesto... pero se reconoce que uno se ha equivocado, se pide perdón y se perdona. Y esto es bueno para la Iglesia, hace que circule en su cuerpo la linfa de la fraternidad. Y también es bueno para toda la sociedad''.

Pero esta fraternidad ''presupone la paternidad de Dios y la maternidad de la Iglesia y de la Madre, la Virgen María.'' Una relación cultivada diariamente con ''la oración, la Eucaristía, con la adoración, el Rosario. Así cada día renovamos nuestro "estar " con Cristo y en Cristo, y establecemos una relación auténtica con el Padre que está en los cielos y con la Madre Iglesia, nuestra Santa Madre Iglesia jerárquica, y la Madre María. Si nuestra vida se sitúa siempre en estas coordenadas fundamentales, también seremos capaces de fraternidad auténtica, de una fraternidad que da testimonio y que atrae''.

Fuente: zenit.org y religiondigital.com

Monday, November 3, 2014

Logo del Año de la Vida Consagrada

El Logo

Vita consecrata in Ecclesia hodie. Evangelium, Prophetia, Spes.


Una paloma sostiene levemente sobre su ala un globo poliédrico, mientras se posa sobre el fluir de las aguas de las que se levantan tres estrellas, custodiadas por la otra ala.

El  Logo para el año de la vida consagrada, expresa por medio de símbolos los valores fundamentales de la vida consagrada.  En ella se reconoce la «obra incesante del Espíritu Santo, que a lo largo de los signos difunde las riquezas de la práctica de los consejos evangélicos a través de múltiples carismas, y que también por esta vía hace presente de modo perenne en la Iglesia y en el mundo, en el tiempo y en el espacio, el misterio de Cristo» (VC5).

El signo gráfico que dibuja el perfil de la paloma corresponde en árabe a la palabra Paz: una llamada a la vocación de la vida consagrada para que sea ejemplo de reconciliación universal en Cristo.

Los símbolos en el Logo

- La paloma sobre las aguas

La paloma pertenece a la simbología clásica para indicar la acción del Espíritu Santo fuente de vida e inspirador de creatividad.  Es una referencia a los comienzos de la historia: en el principio, el Espíritu de Dios aleteaba sobre las aguas (cfr. Gen 1,1).

La paloma, que planea sobre un mar hinchado de vida sin expresar,  recuerda la fecundidad paciente y confiada, mientras que los signos que la rodean revelan la acción creadora y renovadora del Espíritu.

La paloma evoca además la consagración de la humanidad de Cristo en el bautismo.

Las aguas formadas por piezas de mosaico, indican la complejidad y la armonía de los elementos humanos y cósmicos, que el Espíritu hace "gemir" según los misteriosos designios de Dios (cfr. Rm 8,27), para que converjan en el encuentro acogedor y fecundo que lleva a una nueva creación, aunque estén amenazados por un mar de hostilidades - la paloma vuela sobre las aguas del diluvio (Gn 8, 8-14).

Los consagrados y las consagradas en el signo del Evangelio - desde siempre peregrinos entre los pueblos también por las vías del mar - viven su variedad carismática y diaconal como "buenos administradores de la multiforme gracia de Dios" (1Pd 4,10); marcados por la Cruz de Cristo hasta el martirio, habitan la historia con la sabiduría del Evangelio, llevando la Iglesia a que abrace y sane todo lo humano en Cristo.

- Las tres estrellas

Recuerdan la identidad de la vida consagrada en el mundo: como confessio Trinitatis, signum fraternitatis e servitium caritatis. E

xpresan la circularidad y la relación del amor trinitario que la vida consagrada trata de vivir cada día en el mundo, en el signo de la fraternidad. Las estrellan indican también el triple sello áureo con el que la iconografía bizantina honra a María, la toda Santa, primera Discípula de Cristo, modelo y patrona de toda vida consagrada.

El  globo poliédrico

El pequeño  globo poliédrico significa el mundo con la variedad de pueblos y culturas, como afirma el Papa Francisco (cfr EG 236).  El soplo del Espíritu lo sostiene y lo conduce hacia el futuro. Invitación a los consagrados y a las consagradas a que sean "portadores del Espíritu (pneumatophóroi), hombres y mujeres auténticamente espirituales, capaces de fecundar secretamente la historia" (VC 6).

- El Lema: 
  Vita consecrata in Ecclesia hodie. Evangelium, Prophetia, Spes

El lema da un ulterior relieve a identidad y horizontes, experiencia e ideales, gracia y camino que la vida consagrada ha vivido y sigue viviendo en la Iglesia como pueblo de Dios, en el peregrinar de las gentes y de las culturas, hacia el futuro.

Evangelium: indica la norma fundamental de la vida consagrada que es la  «sequela Christital y como la propone el Evangelio" (PC 2a). Primero como  «memoria viviente del modo de actuar y de existir de Jesús" (VC 22), después  como sabiduría de vida en la luz de los múltiples consejos que el Maestro propone a los discípulos (cfr LG 42). El Evangelio da sabiduría orientadora y gozo (EG1).

Profetia: indica el carácter profético de la vida consagrada que se configura "como una forma de especial participación en la función profética de Cristo, comunicada por el Espíritu Santo a todo el Pueblo de Dios" (VC 84).  Es posible hablar de un auténtico ministerio profético, que nace de la Palabra y se alimenta de la Palabra de Dios, acogida y vivida en las diversas circunstancias de la vida. La función se explicita en la denuncia valiente, en el anuncio de nuevas "visitas" de Dios y "en el escudriñar nuevos caminos de actuación del Evangelio para la construcción del Reino de Dios" (ib.). 

Spes: recuerda el cumplimiento último del misterio cristiano. Vivimos en tiempos de extendidas incertidumbres y de escasez de proyectos de amplio horizonte: la esperanza  muestra su fragilidad cultural y social, el horizonte es oscuro porque  "parece haberse perdido el rastro de Dios" (VC 85).

La vida consagrada tiene una permanente proyección escatológica: testimonia en la historia que toda esperanza tendrá la acogida definitiva y convierte la espera "en misión para que el Reino se haga presente ya ahora" (VC 27). Signo de esperanza, la vida consagrada se hace cercanía y misericordia, parábola de futuro y libertad de toda idolatría.

"Animados por la caridad que el Espíritu Santo infunde en los corazones" (Rm 5,5) los consagrados y las consagradas abrazan pues el universo y se convierten en memoria del amor trinitario, mediadores de comunión y de unidad, centinelas orantes en la cresta de la historia, solidarios con la humanidad en sus afanes y en la búsqueda silenciosa del Espíritu.

Fuente: vatican.va

3 palabras sobre la formación, por el Hno. Orlay Meza Gutiérrez, SF.

Paciencia: porque el formador debe tener la capacidad de escuchar, orientar y corregir  fraternalmente a las personas que le fueron confiadas por la Iglesia.

Corresponsabilidad: porque la labor formativa es una obra que se debe realizar de manera conjunta. Para ello es importante que exista un equipo formativo que apoye en todos los desafíos y retos que implica la orientación vocacional de los jóvenes.

Crecimiento: Porque cada día es un momento para aprender, enseñar y formar. La formación sin
duda permite la edificación de bases sólidas y cimientos estables que conducen a una maduración
vocacional y religiosa. 

Sobre el Escolásticado, por el Hno. Orlay Meza Gutiérrez, SF.


Ante todo, la etapa de escolasticado es un tiempo de maduración vocacional, y para ello es  importante contar con una comunidad de hermanos que te acompañen compartiendo en familia este proceso.

Lo que más destaco, es precisamente la fraternidad y la empatía que logramos formar en la casa del escolasticado. Tener el apoyo, la voz de aliento, la motivación y la fortaleza a través de la oración, son algunas de las virtudes que acompañaron mi etapa de formación en Chía.

También es importante resaltar el amor por el trabajo, a ejemplo del carpintero, la responsabilidad y el sentido del deber que el equipo formador nos inculcaron, como una manera efectiva y concreta de responder a esa vocación a la cual fuimos llamados: la vida en Nazaret. 

"El primer factor que estoy totalmente convencido que un joven que busque o no ingresar al Instituto debe encontrar en nosotros, es la alegría. Pero no cualquier tipo de alegría, sino el auténtico gozo de la vida en el hogar de Nazaret. Este, proviene de la configuración profunda con nuestros santísimos patronos, Jesús, María y José; y de este modo, con la vocación de servicio a la que Dios nos ha llamado", Hno. Orlay Meza Gutiérrez, SF.


Friday, June 6, 2014

Monday, February 17, 2014

¿Qué importa que un cura no vista su sotana? por P. Jaime Tovar Patrón



Reproduzco un artículo que Arthur Chacín desde Venezuela ha colgado en la página de Facebook "Hijos de la Sagrada Familia". Es la segunda entrada en la que hace referencia a este tema y me parece que puede favorecer la reflexión y el debate.

EXCELENCIAS DE LA SOTANA

Esta breve colección de textos nos recuerda la importancia del "uniforme sacerdotal", la sotana o hábito talar. Valga otro tanto para el hábito religioso propio de las órdenes y congregaciones. En un mundo secularizado, no hay mejor testimonio cristiano de parte de los consagrados a Dios que la vestimenta sagrada en los sacerdotes y religiosos.

Siete excelencias de la sotana

"Fíjese si el impacto de la sotana es grande ante la sociedad, que muchos regímenes anticristianos la han prohibido expresamente. Esto debe decirnos algo. ¿Cómo es posible que ahora, hombres que se dicen de Iglesia desprecien su significado y se nieguen a usarla?"

Hoy en día son pocas las ocasiones en que podemos admirar a un sacerdote vistiendo su sotana. El uso de la sotana, una tradición que se remonta a tiempos antiquísimos, ha sido olvidado y a veces hasta despreciado en la Iglesia posconciliar. Pero esto no quiere decir que la sotana perdió su utilidad sino que la indisciplina y el relajamiento de las costumbres entre el clero en general es una triste realidad.

La sotana fue instituida por la Iglesia a fines del siglo V con el propósito de darle a sus sacerdotes un modo de vestir serio, simple y austero. Recogiendo esta tradición, el Código de Derecho Canónico impone el hábito eclesiástico a todos los sacerdotes (canon 136).

Código de Derecho Canónico (1983): Título III. De los ministros sagrados o clérigos 284 Los clérigos han de vestir un traje eclesiástico digno, según las normas dadas por la Conferencia Episcopal y las costumbres legítimas del lugar. 285. 1. Absténganse los clérigos por completo de todo aquello que desdiga de su estado, según las prescripciones del derecho particular. 2. Los clérigos han de evitar aquellas cosas que, aun no siendo indecorosas, son extrañas al estado clerical.

Contra la enseñanza perenne de la Iglesia está la opinión de círculos enemigos de la Tradición que tratan de hacernos creer que el hábito no hace al monje, que el sacerdocio se lleva dentro, que el vestir es lo de menos y que lo mismo se es sacerdote con sotana que de paisano.

Sin embargo, la experiencia demuestra todo lo contrario, porque cuando hace más de 1.500 años la Iglesia decidió legislar sobre este asunto fue porque era y sigue siendo importante, ya que ella no se preocupa de niñerías.

Seguidamente exponemos siete excelencias de la sotana condensadas de un escrito del ilustre Padre Jaime Tovar Patrón.

1º - El recuerdo constante del sacerdote

Ciertamente que, una vez recibido el orden sacerdotal, no se olvida fácilmente. Pero nunca viene mal un recordatorio: algo visible, un símbolo constante, un despertador sin ruido, una señal o bandera. El que va de paisano es uno de tantos, el que va con sotana, no. Es un sacerdote y él es el primer persuadido. No puede permanecer neutral, el traje lo delata. O se hace un mártir o un traidor, si llega el caso. Lo que no puede es quedar en el anonimato, como un cualquiera. Y luego... ¡Tanto hablar de compromiso! No hay compromiso cuando exteriormente nada dice lo que se es. Cuando se desprecia el uniforme, se desprecia la categoría o clase que éste representa.

2º - Presencia de lo sobrenatural en el mundo

No cabe duda que los símbolos nos rodean por todas partes: señales, banderas, insignias, uniformes... Uno de los que más influjo produce es el uniforme. Un policía, un guardián, no hace falta que actúe, detenga, ponga multas, etc. Su simple presencia influye en los demás: conforta, da seguridad, irrita o pone nervioso, según sean las intenciones y conducta de los ciudadanos.

Una sotana siempre suscita algo en los que nos rodean. Despierta el sentido de lo sobrenatural. No hace falta predicar, ni siquiera abrir los labios. Al que está a bien con Dios le da ánimo, al que tiene enredada la conciencia le avisa, al que vive apartado de Dios le produce remordimiento.

Las relaciones del alma con Dios no son exclusivas del templo. Mucha, muchísima gente no pisa la Iglesia. Para estas personas, ¿qué mejor forma de llevarles el mensaje de Cristo que dejándoles ver a un sacerdote consagrado vistiendo su sotana? Los fieles han levantando lamentaciones sobre la desacralización y sus devastadores efectos. Los modernistas claman contra el supuesto triunfalismo, se quitan los hábitos, rechazan la corona pontificia, las tradiciones de siempre y después se quejan de seminarios vacíos; de falta de vocaciones. Apagan el fuego y luego se quejan de frío. No hay que dudarlo: la desotanización lleva a la desacralización.

3º - Es de gran utilidad para los fieles

El sacerdote lo es, no sólo cuando está en el templo administrando los sacramentos, sino las veinticuatro horas del día. El sacerdocio no es una profesión, con un horario marcado; es una vida, una entrega total y sin reservas a Dios. El pueblo de Dios tiene derecho a que lo asista el sacerdote. Esto se les facilita si pueden reconocer al sacerdote de entre las demás personas; si éste lleva un signo externo. El que desea trabajar como sacerdote de Cristo debe poder ser identificado como tal para el beneficio de los fieles y el mejor desempeño de su misión.

4º - Sirve para preservar de muchos peligros

¡A cuántas cosas se atreverán los clérigos y religiosos si no fuera por el hábito! Esta advertencia, que era sólo teórica cuando la escribía el ejemplar religioso P. Eduardo F. Regatillo, S. I., es hoy una terrible realidad.

Primero, fueron cosas de poco bulto: entrar en bares, sitios de recreo, alternar con seglares, pero poco a poco se ha ido cada vez a más.

Los modernistas quieren hacernos creer que la sotana es un obstáculo para que el mensaje de Cristo entre en el mundo. Pero, al suprimirla, han desaparecido las credenciales y el mismo mensaje. De tal modo, que ya muchos piensan que al primero que hay que salvar es al mismo sacerdote que se despojó de la sotana supuestamente para salvar a otros.

Hay que reconocer que la sotana fortalece la vocación y disminuye las ocasiones de pecar para el que la viste y los que lo rodean. De los miles que han abandonado el sacerdocio después del Concilio Vaticano II, prácticamente ninguno abandonó la sotana el día antes de irse: lo habían hecho ya mucho antes.

5º - Ayuda desinteresada a los demás

El pueblo cristiano ve en el sacerdote el hombre de Dios, que no busca su bien particular sino el de sus feligreses. La gente abre de par en par las puertas del corazón para escuchar al padre que es común del pobre y del poderoso. Las puertas de las oficinas y de los despachos por altos que sean se abren ante las sotanas y los hábitos religiosos. ¿Quién le niega a una monjita el pan que pide para sus pobres o sus ancianitos? Todo esto viene tradicionalmente unido a unos hábitos. Este prestigio de la sotana se ha ido acumulando a base de tiempo, de sacrificios, de abnegación. Y ahora, ¿se desprenden de ella como si se tratara de un estorbo?

6º - Impone la moderación en el vestir

La Iglesia preservó siempre a sus sacerdotes del vicio de aparentar más de lo que se es y de la ostentación dándoles un hábito sencillo en que no caben los lujos. La sotana es de una pieza (desde el cuello hasta los pies), de un color (negro) y de una forma (saco). Los armiños y ornamentos ricos se dejan para el templo, pues esas distinciones no adornan a la persona sino al ministro de Dios para que dé realce a las ceremonias sagradas de la Iglesia.

Pero, vistiendo de paisano, le acosa al sacerdote la vanidad como a cualquier mortal: las marcas, calidades de telas, de tejidos, colores, etc. Ya no está todo tapado y justificado por el humilde sayal. Al ponerse al nivel del mundo, éste lo zarandeará, a merced de sus gustos y caprichos. Habrá de ir con la moda y su voz ya no se dejará oír como la del que clamaba en el desierto cubierto por el palio del profeta tejido con pelos de camello.

7º - Ejemplo de obediencia al espíritu y legislación de la Iglesia

Como uno que comparte el Santo Sacerdocio de Cristo, el sacerdote debe ser ejemplo de la humildad, la obediencia y la abnegación del Salvador. La sotana le ayuda a practicar la pobreza, la humildad en el vestuario, la obediencia a la disciplina de la Iglesia y el desprecio a las cosas del mundo. Vistiendo la sotana, difícilmente se olvidará el sacerdote de su papel importante y su misión sagrada o confundirá su traje y su vida con la del mundo.

Estas siete excelencias de la sotana podrán ser aumentadas con otras que le vengan a la mente a usted. Pero, sean las que sean, la sotana por siempre será el símbolo inconfundible del sacerdocio porque así la Iglesia, en su inmensa sabiduría, lo dispuso y ha dado maravillosos frutos a través de los siglos.


EL AUTOR: El Padre Jaime Tovar Patrón, coronel capellán, ocupó importantes responsabilidades en el Vicariato Castrense. Oriundo de Extremadura, España, fue rotundo orador sacro. Autor del libro Los curas de la Cruzada, auténtica enciclopedia de los heróicos sacerdotes que desarrollaron su labor pastoral entre los combatientes de la gloriosa Cruzada de 1936. Es además, una historia del sacerdocio castrense. Falleció en enero del 2004.

CONVIENE RECORDAR: Muchos sacerdotes y religiosos mártires han pagado con su sangre el odio a la fe y a la Iglesia desatado en las terribles persecuciones religiosas de los últimos siglos. Muchos fueron asesinados sencillamente por vestir la sotana. El sacerdote que viste su sotana es para todos un modelo de coherencia con los ideales que profesa, a la vez que honra el cargo que ocupa en la sociedad cristiana.

Si bien es cierto que el hábito no hace al monje, también es cierto que el monje viste hábito y lo viste con honor. ¿Qué podemos pensar del militar que desprecia su uniforme? ¡Lo mismo que del cura que desprecia su sotana!

Fuente: Fondo Cultural Católico

¿Un cura puede enamorarse de una mujer?, por Jose Luis Rubio

- ¿Un cura puede enamorarse de una mujer?- lanzo la pregunta al aire en la clase cuando voy ha hablarles del enamoramiento y de la decisión de amar.
- Pues no, no puede- contestan algunos
- ¿Y por qué no?
- Pues por eso, porque es cura.

Ciertamente el campo está abonado, existe una confusión de términos a aclarar y que por tanto nos permitirá descubrir cosas nuevas juntos.

Tenemos que ver entonces una cosa, ¿los sentimientos son voluntarios o involuntarios?- casi todos se quedan pensando, por los gestos que hacen no lo tienen nada claro.

- Os pondré un ejemplo ¿tú puedes decidir que alguien te caiga mal?, ¿puedes decidir que una cosa te dé miedo?
- Pues no- suelta el más decidido- yo no puedo hacer que me den miedo... las escaleras.
- Correcto, aunque es probable que te diesen miedo si de pequeño te caiste por una, pero como bien dices eso no lo decidiste tú
- ¿Pero lo de que alguien te caiga mal? Yo decido con quien me junto o de quien paso...
- Sí, pero no confundas, la decisión que tomas es posterior a tus sentimientos- pone cara de escepticismo- Veamos, dime el nombre de una amiga tuya muy amiga- me dice un nombre- Pues bien, haz que ahora mismo te caiga mal, decide que te resulte antipática.
- Eso no puedo hacerlo, si me cae mal alguna vez será por algo...- su rostro se ilumina mientras lo va diciendo, ya lo ha entendido
- Pues lo mismo ocurre con enamorarse, enamorase es un sentimiento y los sentimientos se forman en nuestra mente sin nuestra voluntad, normalmente relacionados tanto con nuestras emociones como con nuestras experiencias pasadas, por eso a veces son tan sorprendentes.

¿sorprendentes?

Sí, un día resulta que te vuelve loquita ese compañero tuyo que tiene gafas y tú te preguntas ¿pero cómo me tiemblan las rodillas ante este chico si a mí nunca me han gustado los que llevan gafas? - las chicas ríen, ellos se hacen los duros- o resulta que no puedes quitarte de la cabeza a esa chica delgadita cuando a ti siempre te han llamado la atención las pechugonas- ahora ríen todos.

La cosa parece que marcha, los chicos están interesados y puedo seguir profundizando.

Ahora bien, los sentimientos son muy importantes, forman parte de nosotros, pero pueden ser también peligrosos y por eso debemos aprender a manejarlos

- ¿Pero no has dicho que son involuntarios, que no dependen de nosotros?

Que surja un sentimiento no puedes evitarlo, pero sí que puedes fomentar las circunstancias en las que es posible que aparezcan o evitarlas hasta que disminuyan- esto ha sonado a chino- Vuelvo a los ejemplos, te ha llamado la atención una chica, tú procuras hablarle, conocerla un poco mejor, intentar quedarte con ella a solas... es posible que así surja el enamoramiento... o no, que no haya ningún tipo de “magia”. O al revés, te ha hecho gracia la novia de tu mejor amigo, y evitas esas mismas circunstancias para que no surja nada más que complique vuestra amistad.

- ¿Incluso si te has enamorado ya?

- Incluso, aunque no sin dolor. ¿Recordáis el caso del cura que os pregunté? Veamos, un cura de repente nota que se ha enamorado de una chica de su parroquia, es un sentimiento que le ha surgido, no lo puede evitar. Pero por mucho que le guste, él ha decidido ser cura y esa es su auténtica vocación, ¿qué puede hacer?

- Pues probablemente algo como lo que has dicho- contesta uno- evitar quedarse con ella a solas, no darle ningún trato especial ni interesarse en sus circunstancias personales...

- Es muy correcto. Y así es posible que el sentimiento vaya disminuyendo hasta desaparecer, o incluso aunque así no sea, que el sacerdote sea responsable con su vocación y se diga a sí mismo “aunque me he enamorado de esta chica, no quiero dejar de ser sacerdote, y me guardaré este sentimiento para mi, pero nada más”

- ¿Y los que no son sacerdotes?

- Lo mismo, enamorarse es involuntario, decidir amar no. Si te enamoras de un chico que es un violento y piensas que una relación con él sería un peligro, te apartas, como del fuego.

- ¿Pero eso no es ir en contra de lo que realmente somos?

- No, pero gracias por la pregunta, por que esa es la cuestión del millón. Los sentimientos forman una parte importante de mí, pero no son yo. Yo soy mucho más que sentimientos, también tengo inteligencia, razón, voluntad, moral, proyectos... obrar sólo por sentimientos es un absurdo. Veamos, si un señor de 50 años casado y con hijos deja a su familia y se va con una chica de 25, ¿podemos disculparlo por que son sus sentimientos?

- Pues no, ese tío es es un sinvergüenza.

- Pues igual ocurre con toda nuestra vida. Yo puedo tener odio hacia alguien, pero puedo decidir tratar de aminorarlo o matar a esa persona

- ¿Y con el amor?

- Permíteme que te conteste con una pregunta, cuando vayas a casarte y le digas a tu novio lo de “prometo amarte en la salud y la enfermedad todos los día de mi vida” ¿qué estás comprometiendo, tus sentimientos o tu voluntad?- silencio- dicho de otra manera ¿tu puedes saber lo que sentirás dentro de 20 años?- niegan con la cabeza- pues entonces no puedes comprometer tus sentimientos, ya que no tienes control sobre ellos, lo que puedes comprometer es tu voluntad, que libremente has decidido estar con esa persona, apoyarle y acompañarlo el resto de tu vida- “tensión” en el ambiente.

- ¿Pero entonces debemos seguir con alguien aunque se haya pasado el amor?

- No el amor, el enamoramiento. Ese enamoramiento romántico que os hace estar tan capullos- ríen- desaparece, es ley de vida. Pero si eres consecuente con tu decisión, sobre él crece lo que llamamos el amor verdadero, que tiene mucho más que ver con la complicidad, la ternura o la compenetración, eso es lo que te hace amar de verdad.

La idea general está clara, pero aún hay mucho que matizar...

FUENTE: religionenlibertad.com

Tuesday, January 14, 2014

"H" de hijos e hijas, por M. Dolors Gaja, MN


Para Manyanet una palabra muy querida es hijo, hija. El religioso y la religiosa  de su Instituto se reconoce, ante todo, hijo de la Sagrada Familia. En el libro de La Escuela de Nazaret, Jesús, María y José llaman a Desideria “hija” como el más bello de los nombres. Y ella se identifica hasta suplicar: Bendecid ahora a vuestra hija y quedará del todo consolada.

Ser hijo/a de la Sagrada Familia nos define. Por cuanto Jesús, a quien nos consagramos y seguimos, es Hijo; por cuanto un hijo debe parecerse a su Padre y “ser santo como Él es santo”. El hijo es fruto del amor.

Manyanet se sabe hijo de un amor de predilección y también son hijos de este amor los dos Institutos. Pero además el hijo vive en la intimidad de la familia…de la familia de Jesús, María y José. Por eso, por ser hijo/a, podemos ser testigos y apóstoles de la Sagrada Familia.

“Este solo calificativo debe llenarnos de esperanza y alegría santa, a la par que recordarnos constantemente que hemos sido llamados a copiar en nosotros con mayor perfección las virtudes, de las que nos dieron admirable ejemplo nuestros amados padres Jesús, María y José”.

Es una palabra bonita en su significado. Viene del latín “filius”, palabra que emparenta con “felix, felicis” que significa fértil, fecundo y, por extensión, feliz.

Por tanto, somos plenamente hijos/as de la Sagrada Familia si, como tales, somos fecundos en nuestra vida, si engendramos vida. Porque el hijo, que recibe la vida por definición, está llamado a ser fértil. Sólo así será feliz.

Manyanet no quiso para sus hijos e hijas otro nombre que el de hijos. El espíritu de filiación que recibimos en el bautismo halla su plenitud en la vivencia de Nazaret. Sabernos hijos/as hace florecer en nosotros las virtudes que caracterizan Nazaret: el abandono, la simplicidad y sencillez, la acogida, la capacidad de asombro, el afán de conocer – de alcanzar la auténtica sabiduría- la confianza, la transparencia de corazón.

Dicen que nuestro mundo ha “matado” la figura del Padre. No lo sé, tan sólo sé que necesitamos ser lo que somos: hijos.

Y por supuesto, reconocernos hijos implica vivir como hermanos, que también tiene H!

Monday, January 6, 2014

La monja que enseña a las presas a entrenar perros: su programa es un éxito en EEUU y 30 países


La monja Pauline Quinn ha estado en Argentina realizando una visita de 40 días a la Unidad penitenciaria 31 de Ezeiza. En esta prisión, junto a un grupo de adiestradores, enseña a las internas a entrenar perros que luego serán entregados en comodato a personas con discapacidades motrices.

La historia de la hermana Quinn comenzó en 1981 cuando inició este programa que comenzó a implementarse en Argentina hace ya dos años. La experiencia Dog Prision Program se reproduce hoy en más de 300 cárceles en EEUU. Sólo en el estado de Ohio hay 33 funcionando.

Infancia traumática

Cathy (así se llamaba Pauline) nació en Santa Mónica, California, en el seno de una familia disfuncional. Su padre abandonó el hogar cuando ella era un bebé y su madre, que sufría problemas con la bebida, volvió a casarse.

Su padrastro la sometió a maltrato físico y verbal. A los 12 se escapó de casa por primera vez.  "Sabían mantener las apariencias muy bien. Nadie se daba cuenta de lo que pasaba en casa. Para la gente, la conflictiva era yo", dice la hermana Pauline.

Violada por un policía, 
dio a su hija en adopción

"Pasaba de un instituto a otro. Fui torturada, traumatizada y abusada", explica. A los 16 volvió a vivir en la calle y entonces sufrió su experiencia más terrible: el policía a cargo de la cuadra donde ella vivía la violó. Ella se quedó embarazada, tuvo una niña, e incapaz de hacerse cargo, la dio en adopción.

Recuerda la hermana Pauline: "En ese momento, mi autoestima desapareció por completo. Me volví sumamente vulnerable. Casi no hablaba con nadie. De hecho, la gente me evitaba. Me aferré a un solo deseo: quería tener un perro".

Le regalan a Joni, un ovejero alemán

Un vecino de la cuadra se compadeció de ella y le regaló a Joni, una cachorra de ovejero alemán. Joni se volvió una amiga leal que le respondía incondicionalmente. Fue el principio del milagro: las personas que antes la evitaban comenzaron a hablarle, le preguntaban por Joni, le ofrecían alimento para la perra y ropa para ella.

Cathy pudo empezar a reconstruir su autoestima y fue perdiendo el temor permanente que sentía. Hoy dice que nunca llegó a perder la fe en Dios y que cuando pasaba sus peores momentos se juraba ayudar a otros si lograba salir adelante. Venía de una familia de mormones, pero encontró el auxilio que necesitaba en las monjas dominicas. A los 35 años ingresó en la orden y se convirtió en "sister Pauline".

Desarrolla el Dog Prison Program

Fue entonces cuando comenzó a desarrollar su Dog Prision Program. En la actualidad se ha implementado con éxito en la casi totalidad de las cárceles norteamericanas y las de otros 30 países. Al principio la religiosa no pensó en trabajar en las cárceles, pero luego cambió de idea. "Me di cuenta de que sería bueno para los internos hacer este trabajo como terapia ocupacional".


La monja llegó por primera vez a Argentina en el año 2009 para presentar su programa, gracias a un contacto que hizo con el doctor Juan Enrique Romero, y volvió en 2011 para implementarlo.

En su visita del 2013, Quinn se quedó nada menos que 40 días en la Unidad 31 de mujeres de Ezeiza donde enseñó a las internas cómo entrenar a perros Golden Retriever.

Muchos internos abren escuelas

"El doble objetivo de este programa es el de aprender a trabajar en equipo, a resolver problemas y a trabajar por el otro", comenta Quinn, quien afirma que no todos pero sí muchos de los internos que salen de prisión tras participar de esta experiencia, abren escuelas de adiestramiento canino.

La historia de la hermana Pauline es tan impresionante y conmovedora que ha sido llevada al cine por Hollywood: la película se llama originalmente Within these walls, y en su versión española Alas de libertad. Está protagonizada por Ellen Burstyn y Laura Dern.


Fuente: religionenlibertad.com

Sister Pauline in Facebook

Sunday, January 5, 2014

Voto de pobreza y relación fraterna con el prójimo, Francisco, Papa.

Finalmente, hay una forma más de promover la fraternidad –y así vencer la pobreza– que debe estar en el fondo de todas las demás. Es el desprendimiento de quien elige vivir estilos de vida sobrios y esenciales, de quien, compartiendo las propias riquezas, consigue así experimentar la comunión fraterna con los otros. Esto es fundamental para seguir a Jesucristo y ser auténticamente cristianos. No se trata sólo de personas consagradas que hacen profesión del voto de pobreza, sino también de muchas familias y ciudadanos responsables, que creen firmemente que la relación fraterna con el prójimo constituye el bien más preciado.

Fuente: La fraternidad, fundamento y camino para la paz, n.5. Mensaje del papa Francisco para la celebración de la Jornada Mundial de la Paz, 2014.